KONICHIWA MINNA! ¿Me habéis echado de menos? (Yo sé que sí). Sé que he estado desaparecida (muy desaparecida), pero bueno, la culpa ha sido de Barbi, para que conste.
Seguro que os estaréis preguntando qué hago por aquí después de haber estado tanto tiempo sin haber dado señales de vida, pero la verdad es que no estoy sola, pues Barbi y yo os traemos esta entrada de una nueva sección: Intercambio anime. ¿En qué consiste? Pues muy fácil. Hace ya tiempo, en un mundo muy lejano, se nos ocurrió (no sé de quién fue la idea) mandarnos animes la una a la otra para así “obligarnos” a ver géneros que no solíamos ver (o sea, Barbi yaoi y yo shojo), pero al final lo dejamos de hacer y aquí estamos otra vez, aprovechando la cuarentena para hacernos sufrir de nuevo. Tengo que recalcar que digo lo de sufrir porque ella no paraba de mandarme yaois y yo a ella shojos cursis, pero en esta ocasión hemos prometido ser buenas (más nos vale, by Barbi).
Andrea:
Os aseguro que estaba convencida de que me iba a mandar un yaoi, así que os podréis imaginar mi cara de sorpresa cuando me dijo que el anime que tenía que ver era Kaguya-sama wa Kokurasetai: Tensai-tachi no Renai Zunousen (kaguya-sama para los amigos). Así a primeras no tenía ni idea de qué anime se trataba (estoy súper desfasada en cuanto a todo lo nuevo que ha salido), pero busqué en mi lista de animes y resultó ser que lo tenía como “pendiente”. Y luego imaginaros mi otra sorpresa cuando veo que es un anime romántico. Yo la habré fastidiado a ella con el que le mandé, pero ella se ha portado bastante bien (si es que soy un angelito, by Barbi), así que me tocará ser buena con el próximo. Por ser romántico ya sé que el anime me va a gustar, pero además el argumento me llama bastante la atención así que seguro que me acaba gustando bastante. Aun así, deseadme buena suerte. ¡Ya os contaré en la próxima entrada!
Barbi:
Yo no sé en qué momento pensé que esto era buena idea retomarlo...De primeras pensé me va a mandar un shojo, es que lo tenía más claro que el agua pero luego dije no creo que sea tan mala persona y me mandé uno nada más empezar, me relajé y ¿qué pasó? Me mandó un shojo. (Para que veas que sí que soy mala persona, by Andrea) Tremenda hostia en la cara me llevé, me dieron ganas de llorar...no te lo perdonaré, Andrea. Bueno, el anime que me tocó fue: Akagami no shirayuki-hime. A ver, de este anime sé que es un shojo y que el protagonista se llama Zen (en verdad pensaba que se llamaba Ren, fail que me mandé), y ya, no tengo ni idea de cúal es su trama a parte de que seguro va a ser horrible y pasteloso de esos que le gustan a ella. Acaben con mi sufrimiento. Ah, encima de todo esto me acaban de chivar que tiene dos temporadas...Te odio, Andrea, no sabes cuando (nah en verdad la quiero, pero ahora mismo no mucho). ¿A quién se le ocurre mandarme un shojo de dos temporadas nada más empezar? A ella. Ya verás para la próxima te vas a enterar...te va a caer un yaoi como un templo (y así es como nos queremos nosotras). En fin, a ver qué me parece este nuevo shojo del infierno, os contaré próximamente, si es que sigo viva (bien te gusta exagerar, by Andrea).
Con esto y un bizcocho hasta mañana a las ocho. Esperamos que os haya gustado esta nueva iniciativa entre nosotras, ahora lo bueno sería continuarlo y no como la otra vez (mira a ver, Andrea). Os esperamos siempre en comentarios aunque también podéis hablarnos por instagram que os contestaremos encantadas de la vida. SAYONARA MINNA!
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